Según la información preliminar, a las 8.30 de la noche un artefacto explotó en un tacho de basura en la calle 23 y la avenida 6ta, en el barrio de Chelsea de Manhattan. Cerca de las 11 de la noche se habría encontrado un segundo artefacto a cuatro cuadras de allí, en la calle 27 y la avenida 7ma. En una conferencia de prensa, el alcalde Bill de Blasio confirmó que había sucedido «un incidente muy serio» y que el ataque había sido «intencional», pero quizás para llevar tranquilidad aclaró que por el momento no parecía un acto vinculado al terrorismo. Los heridos, dijo el alcalde, eran leves, aunque uno estaba en condición crítica. La investigación avanzaba y estaban revisando los videos de las cámaras de seguridad de la zona.

La explosión destruyó los vidrios de un edifico de cinco pisos y esparció los escombros por la calle. Como precaución, todos los tachos de basura de la zona fueron revisados. Y aparentemente un «segundo aparato» fue hallado en la calle 27. Este último se trataría de una olla a presión con un detonador, el mismo elemento utilizado para llevar a cabo el atentado de la maratón de Boston en 2013. Además, las autoridades seguían alertas a la aparición de un tercer bulto sospechoso.

La noticia llegó en medio de la campaña y los candidatos enseguida se posicionaron. El republicano Donald Trump, en un acto en Colorado, fue muy específico al decir que «que expotó una bomba en NY». «Vivimos en tiempos difíciles y debemos ser duros, muchachos», dijo.

La demócrata Hillary Clinton habló en su avión de campaña con los periodistas. Dijo que rezaba por las vícitimas y que estaba en contacto con el alcalde De Blasio y otros funcionarios para ver cómo vanzaba la investigación. Urgió a tener cautela. «Es temprano para especular», dijo y prefirió esperar a que los investigadores avanzaran su tarea.

Una poderosa explosión que el alcalde definió como un «acto intencional– causó esta noche 29 heridos en Nueva York y puso a todas las fuerzas de seguridad en alerta, en momentos en que más de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno ?incluido el presidente Mauricio Macri– están por arribar a la ciudad para la Asamblea de las Naciones Unidas. Por ahora las autoridades no ven indicios de que haya sido un atentado terrorista, señalaron.

Según la información preliminar, a las 8.30 de la noche un artefacto explotó en un tacho de basura en la calle 23 y la avenida 6ta, en el barrio de Chelsea de Manhattan. Cerca de las 11 de la noche se habría encontrado un segundo artefacto a cuatro cuadras de allí, en la calle 27 y la avenida 7ma. En una conferencia de prensa, el alcalde Bill de Blasio confirmó que había sucedido «un incidente muy serio» y que el ataque había sido «intencional», pero quizás para llevar tranquilidad aclaró que por el momento no parecía un acto vinculado al terrorismo. Los heridos, dijo el alcalde, eran leves, aunque uno estaba en condición crítica. La investigación avanzaba y estaban revisando los videos de las cámaras de seguridad de la zona.

La explosión destruyó los vidrios de un edifico de cinco pisos y esparció los escombros por la calle. Como precaución, todos los tachos de basura de la zona fueron revisados. Y aparentemente un «segundo aparato» fue hallado en la calle 27. Este último se trataría de una olla a presión con un detonador, el mismo elemento utilizado para llevar a cabo el atentado de la maratón de Boston en 2013. Además, las autoridades seguían alertas a la aparición de un tercer bulto sospechoso.

La noticia llegó en medio de la campaña y los candidatos enseguida se posicionaron. El republicano Donald Trump, en un acto en Colorado, fue muy específico al decir que «que expotó una bomba en NY». «Vivimos en tiempos difíciles y debemos ser duros, muchachos», dijo.

La demócrata Hillary Clinton habló en su avión de campaña con los periodistas. Dijo que rezaba por las vícitimas y que estaba en contacto con el alcalde De Blasio y otros funcionarios para ver cómo vanzaba la investigación. Urgió a tener cautela. «Es temprano para especular», dijo y prefirió esperar a que los investigadores avanzaran su tarea.

El barrio Chelsea, donde se produjo la explosión.

Uno de los testigos dijo al canal NY1 que vio a una persona con una herida en la cabeza y restos de sangre en su camisa. También aseguró que en la zona no había humo y que después de las primeras señales de nerviosismo había vuelto la calma.

Los hechos se conocen horas después de que las autoridades de Nueva Jersey, estado vecino a Nueva York, informaran de la explosión de un artefacto explosivo en la localidad Seaside Park, sin que dejara heridos ni daños materiales. El alcalde di jo que no había relación entre los dos hechos.

El lunes comienza en Nueva York una Cumbre sobre refugiados y el martes se inaugura la Asamblea general de las Naciones Unidas, donde llegan los mandatarios de todo el mundo. Septiembre es un mes crítico para Nueva York, con la organización además del US Open de tenis y la Semana de la moda.