Luego de tres años, la peregrinación Paraná-Nogoyá que se realiza cada mes de julio en honor a la Virgen del Carmen, vuelve a ser presencial y un centenar de peregrinos comenzó este miércoles a caminar durante tres días los 120 kilómetros que separan la capital entrerriana del santuario de Nogoyá. Será la 14º edición de la peregrinación y en este 2022 el lema elegido es "Madre del Carmen, ayúdanos a caminar juntos, en comunión, participación y misión".
Elonce registró con imágenes y testimonios la partida de devotos y servidores a las 8 desde el santuario a la Virgen del Rosario ubicado sobre Ruta 12, en el ingreso a Paraná.
"Venimos de Tigre, Buenos Aires, pero nos enganchamos para hacer la caminata hacia Nogoyá, de donde somos oriundos", contó un hombre. Su esposa, en tanto, aguardaba a dar los primeros pasos "para entrar en calor". "Hace unos cinco años queríamos sumarnos, pero por una cosa u otra, pandemia de por medio, nunca salía, hasta que este año arrancamos", indicó la mujer.
"Vamos a agradecer a la Virgen por tanto que nos da, porque hay tantos otros que no pueden caminar, y uno que puede, tiene estar agradecido a Dios", fundamentó él. Mientras que ella comentó que lo hacía "para pedir por el país y por un montón de gente de los que llevamos pedidos por salud, trabajo y cuestiones difíciles".
"Vengo a agradecer", aseguró a Elonce un nogoyaense que se sumaba a la muestra de fe por primera vez y se mostró "emocionado" porque dijo ser devoto del Sagrado Corazón de Jesús y había sido designado en el rol de orfebre; es decir que era guía y responsable de la seguridad de los peregrinos, además de coordinar la asistencia en las paradas y/o traslado hasta la próxima para los que no pueden seguir caminando.
Otro orfebre, que por tercera vez que peregrinaba, aseguró que lo hacía con "emociones nuevas" y bregó para que el tiempo acompañe. "Siempre vengo a agradecer por todo lo que pasó en la pandemia", remarcó.
La peregrinación, que partió este miércoles por la mañana desde Paraná, llegaría a Nogoyá el 15 de julio a las 18 horas, pasando las noches de los días 13 y 14 en Crespo y Hernández, respectivamente. Los devotos deben caminar por la banquina con custodia policial y presencia de ambulancia; y en el trayecto, reciben frutas, golosinas, galletitas y deben ingerir mucha agua.
"La primera parada es el Monasterio Benedictino "Nuestra Señora del Paraná", donde está previsto el almuerzo, y la segunda parada es en Crespo, donde se sirve la merienda. Ya está todo programado", explicó una servidora. "Es la Virgen la que te lleva", fundamentó.
"Es la primera vez que peregrino y lo hago por una promesa que tenía que cumplir, y acá estamos, para agradecer por tanto", indicó una joven. "Por una promesa que le hice a la Virgen y para vivir la experiencia", aseguró otra jovencita de Nogoyá.
"Me motiva dar gracias a la Virgen por tanto, por la fe que una tiene y porque en el mes de julio se movilizan muchas cosas dado que soy en Nogoyá, y por la fe que creció en mi con el paso de los años, ella es como mi mamá del cielo y es mucho lo que hay que agradecer", señaló otra servidora de una alianza de 14 peregrinas.
