A sólo horas de volver a la Casa Blanca, el equipo médico del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó este martes que el mandatario no muestra "ningún síntoma" de coronavirus, una noticia que habilitó su vuelta a la campaña con el anuncio de la suspensión de las negociaciones con la oposición para aprobar un nuevo paquete de estímulo por la pandemia en el Congreso.
La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata "Nancy Pelosi está pidiendo 2,4 billones de dólares para rescatar a estados demócratas mal gestionados y con altas tasas de crímenes. Dinero que de ninguna manera está relacionado con la Covid-19. Hicimos una oferta muy generosa de 1,6 billones de dólares y, como es usual, ella no está negociando en buena fe", escribió Trump en su Twitter.
"Rechazo su pedido y miro hacia el futuro del país. Di instrucciones a mis representantes que detengan las negociaciones hasta después de las elecciones, cuando, inmediatamente después de ganar, aprobaré un masivo paquete de estímulo que se enfocara en los trabajadores estadounidenses y los pequeños empresarios", agregó y puso fin a una pulseada en el Congreso que lleva meses, pese al derrumbe económico que enfrenta el país por la pandemia.
"Una vez más, el presidente Trump mostró la hilacha: ponerse primero a expensas del país, con la total complicidad de los legisladores republicanos", respondió Pelosi, la máxima líder opositora en el Congreso, en un comunicado, citado por la agencia de noticias AFP.
Poco después, se sumó Joe Biden, el candidato presidencial opositor.
"No se equivoquen: si estás sin trabajo, si tu negocio cerró, si la escuela de tu hijo está cerrada, si estás viendo despidos en tu comunidad, Donald Trump decidió hoy que nada de eso le importa. No habrá ayuda desde Washington en el futuro cercano. En cambio, quiere que el Senado use ese tiempo para confirmar a su candidata para la Corte Suprema antes de las elecciones", escribió Biden en un comunicado difundido en sus redes.
En las últimas 24 horas, Trump no solo suspendió las negociaciones en el Congreso, sino que además atacó a Biden por su promesa de legalizar el aborto, si la ratificación de su nominada para la Corte Suprema es aprobada y el nuevo tribunal anula el histórico fallo Roe versus Wade que habilitó ese derecho en 1973.
En una serie de tuits, Trump volvió a bajarle el tono a la pandemia: "es bastante menos letal" que una gripe, aseguró.
Además, expresó su deseo de participar en el debate presidencial que se realizará la noche del jueves 15 de octubre en Miami.
"¡Será genial!", escribió Trump, pese a que su médico personal, Sean Conley, dijo ayer que aún no está del todo fuera de peligro y el virus podría continuar activo en su cuerpo "entre 7 y 10 días".
Los médicos continuaron hoy monitoreando los signos vitales de Trump y esta noche debe recibir una dosis intravenosa del antiviral remdesivir, luego que se supiera que durante el fin de semana sus niveles de oxígeno bajaron preocupantemente, por lo que había necesitado suministro externo.
Sin embargo, según el comunicado de hoy de Conley, "los signos vitales y el examen físico permanecen estables, con un nivel de saturación de oxígeno ambulatorio del 95-97%".
"En general, continúa haciéndolo extremadamente bien", agregó.
Aún se desconoce cómo afrontará Trump estas últimas semanas claves de la campaña, especialmente cuando crecen los rumores sobre posibles nuevas complicaciones médicas.
Un funcionario de la Casa Blanca le dijo hoy a la cadena de noticias CNN que los problemas de salud del mandatario persisten, una información que ya había publicado el diario The Washington Post.
La campaña oficialista no solo se podría ver afectada por la enfermedad de Trump, sino por el contagio masivo que diezmó a parte de su personal y que sigue obligando a muchos a ponerse en cuarentena.
En ese mismo sentido, fuentes oficiales informaron hoy que el jefe del Estado Mayor conjunto, el general Mark Milley, y otros miembros de la cúpula del Pentágono estánen cuarentena porque un subcomandante dio positivo en coronavirus.
Según los diarios New York Times y The Wall Street Journal, la cuarentena afecta a casi todos los principales asesores militares de Trump.
Mientras el contagio en las primeras líneas del Gobierno parece no tener fin, Trump se encuentra aislado en la residencia de la Casa Blanca, donde se instalaron oficinas provisorias junto a la sala médica del sótano del edificio.
Al igual que lo hizo en el centro médico, se concentró en la campaña presidencial, que termina en menos de un mes.
Hoy recibió una mala noticia: una encuesta nacional de CNN realizada por SSRS mostró que está detrás de Biden por 16 puntos porcentuales, el margen más amplio de la carrera hasta ahora.
"¡Volveremos pronto a la campaña! Las noticias falsas solo muestran las encuestas falsas", reaccionó Trump, quien delegó sus próximos actos en su vicepresidente, Mike Pence, y su entorno más cercano.