El Ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, consideró hoy que "las medidas son antipáticas" pero fueron dispuestas para "evitar consecuencias peores".
En diálogo con Periodismo Para Todos, Lacunza señaló que "las reservas totales del Banco Central son de 57 mil millones de dólares para atender la demanda que haya de depósitos, del mercado cambiario, de pago de deuda".
El titular de Hacienda expresó que este "control de capitales" se hace "por una realidad: que no podés negar". En ese sentido apuntó a la contundente derrota del Gobierno en las PASO: "Del 12 de agosto para acá hay un cambio evidente, el riesgo país pasó de 900 a 2000 en esa semana, el dólar de 45 a 55 pesos".
"No es cierto que el Banco Central especuló por instrucción del Presidente", expresó el ministro por las críticas de la oposición sobre las reacciones del Gobierno tras la fuerte devaluación post elecciones. "No existe tal cosa como teoría conspirativa", agregó el ministro quien también lamentó que "la Argentina perdió crédito después de ese día".
A su vez, declaró que "hay una incertidumbre con respecto a si las reservas alcanzan para todas las demandas potenciales que básicamente son tres: los que quieren dolarizarse, depositantes, y tercero los pagos de deuda". La prioridad está en "los ciudadanos de a pie": "Que el dólar no suba más de lo que está", manifestó.
Ante el control cambiario que impulso el Gobierno, el economista dijo que "puede ser que aparezca un tipo de cambio paralelo". "Es economía informal que no tiene por qué trasladarse a precios", agregó.
También intentó generar tranquilidad al asegurar que "todo va a ser normado por el Banco Central con un criterio transparente". Y aseguró que el Fondo Monetario Internacional está al tanto de las recientes medidas: "Se le comunicaron las modificaciones y sus fundamentos".