Fiscalía ya anticipó que pedirá una condena de 12 años de cárcel.
Las audiencias del juicio oral al gremialista se iniciaron el 8 del actual, y en su transcurso, Díaz ya declaró por primera vez y dijo que la acusación en su contra «es todo mentira», y que además la acusación se basa en una operación política producto de la interna del justicialismo de Gualeguay.
Rubén Gallardo, quien ejerce la defensa de Díaz, había dicho que su estrategia es sostener la inocencia de su defendido en el juicio. «Sostenemos la inocencia de Díaz. Hay una conjunción de una denunciante acompañada de un sector del justicialismo local, donde la mayoría de los testigos son parientes y militantes del ex intendente Luis Erro, según la declaración de más de diez horas de Diaz», planteó.
Y agregó: «Estamos convencidos de la inexistencia de los hechos falsos denunciados, en donde además se acusó al Sindicato de la Carne de lavar dinero. Díaz manifestó que todo es un entramado político». Planteó además que el dirigente del Sindicato de la Carne dijo en su declaración que «a su llegada al sindicato se terminó la injerencia partidaria dentro del sindicato, reivindicando por otra parte su pertenencia al PJ».
La acusación del dirigente está a cargo de los fiscales Fernando Martínez y Jorge Gutiérrez, en tanto que Carlos Reggiardo actúa como querellante.
El caso se abrió en 2020, luego de que una expareja de Díaz lo denunció por delitos gravísimos: abuso sexual con acceso carnal en dos oportunidades, lesiones, amenazas, suministro de estupefacientes y violación de domicilio. Todo eso en un contexto de violencia de género, lo que agrava aún más la situación del dirigente sindical.
La denuncia de MP -que fue pareja del dirigente del Sindicato de la Carne durante dos años, entre 2018 y 2020- quedó caratulada «Díaz Aldo Alejandro s/violencia de género. Coacciones». En la investigación penal preparatoria, se tipificaron los hechos como «lesiones graves agravadas por mediar violencia de género, relación de pareja anterior, abuso sexual agravado por acceso carnal reiterado y por mediar violencia de género, amenazas reiteradas, violación de domicilio, suministro de material estupefaciente, todo en concurso material entre sí».
La querella había aportado en la causa el testimonio de una integrante de la Multisectorial de Mujeres de Gualeguay, MJB, que relató el modo cómo la expareja de Díaz contactó a la entidad para poner al corriente a sus integrantes de la denuncia que pensaba presentar contra el dirigente sindical.
Pero el testimonio de MJB en la Justicia incorporó otros aspectos: testificó sobre lo que la mujer le contó en cuanto a abuso sexual, violencia de género, violencia económica y suministro de estupefacientes, y habló de lavado de dinero.
"Ella no me contó en detalle sobre la plata que se lavaba, pero sí me contó que no solo se manejaba con la plata del Sindicato (de la Carne) que aportan desde Soychú (un frigorífico de Gualeguay) sino también de un sindicato o mutual de Buenos Aires, que no recuerdo bien, pero a eso me hizo referencia, que incluso ella fue testigo de esa corrupción, pero no me dio tantos detalles ni indagué por eso", se lee en su testimonio.
En su declaración, el fiscal Gutiérrez preguntó si sabía de qué se trata el delito de lavado de dinero, y MJB respondió: "Sí, sé, para mí es lo que se genera del Sindicato con aportes de los trabajadores, que no serían invertidos en lo que corresponde sino en compras ajenas con apellidos y nombres ajenos al Sindicato".
Contó, también, que MP le dijo en un encuentro que mantuvo con ella que tenía temor de denunciar a Aldo Díaz por sus contactos en Gualeguay y "porque él la amenazaba, que él tenía gente dentro de la política, que su jefe Vittulo tenía gente dentro de la Justicia y no le iban a dar pelota".
Su testimonio abrió una grieta y una contradenuncia de parte del titular del Sindicato de la Carne porque consideran, según fuentes de la investigación, que sería cercana al exintendente Erro, enemigo político declarado de Vittulo, enrolado en la interna del PJ junto al dirigente Aldo Díaz.
Martínez fue contratado por el Sindicato de la Carne para querellar a la testigo MJB por sus dichos en la Justicia en torno al lavado de dinero.
Las sospechas que ahora rodean la causa se relacionan con la interna del PJ de Gualeguay y la eterna disputa Erro-Vittulo, y de qué modo uno y otro sector se enfrentan en un terreno delicadísimo: una investigación por violencia de género.
Fuente: Entre Ríos Ahora