El mandatario presentó los puntos centrales de la propuesta como la Boleta Única en Papel, nuevas reglas para el desarrollo de las campañas y el proceso electoral, así como la actualización de criterios de organización de los partidos políticos.
"Queremos que esta sea una política de Estado", señaló Frigerio, y aclaró que el principal objetivo es "acercar la política a la gente". Además sostuvo que "no es el proyecto del oficialismo", y puso en valor que "se elaboró en base al aporte de todos y cuando sentimos que había madurado suficiente lo enviamos a la legislatura".
Señaló que no sólo se trata de una reforma electoral, sino que también tendrá impacto en cuestiones "que hacen al ejercicio de nuestra democracia". Mencionó en este sentido que la propuesta condensa cinco leyes en un solo cuerpo jurídico.
Indicó además que se proponen nuevos criterios para el financiamiento de las campañas, "con reglas parejas para todos los contendientes, porque la reforma también se trata de la equidad y la transparencia".
Sobre la Boleta Única en Papel (BUP), Frigerio explicó que el objetivo es ofrecer a los votantes una oferta clara y sencilla. "Recordemos lo que fue la última elección en nuestra provincia, con la cantidad de boletas que había. Eso atenta contra el derecho a elegir de la mejor manera a sus representantes", señaló.
Remarcó además que es una forma de reducir el impacto ambiental y abaratar los costos de impresión. La provisión de las boletas quedaría a cargo del Estado, lo que aseguraría su disponibilidad permanente y facilitaría la fiscalización.
Frigerio consideró que la propuesta se vincula con la ley de Ficha Limpia y que plantea la actualización de los criterios de organización de los partidos políticos, además de reglas claras para definir las fechas de los comicios. "Y acota las ventajas que tiene el oficialismo a la hora de una elección. Ya no se permitirán inauguraciones o definiciones en plena campaña", agregó.
El proyecto de ley sostiene el mecanismo de las PASO para la selección de las candidaturas y la posibilidad de hacer elecciones concurrentes con las nacionales si se usan instrumentos distintos de votación. Por último, procura la creación de una Dirección Provincial Electoral que asista al Tribunal Electoral en la organización de las elecciones.