"Lo que teníamos era un subsidio a los usuarios de tarjeta de débito, y no era el más eficiente en términos de equidad. Los sectores de bajos recursos usan menos la tarjeta débito que los de ingresos medios y altos", explicó el funcionario en una entrevista que publica hoy el diario La Nación, al ser consultado sobre la decisión del gobierno nacional de poner fin a la medida que regía desde 2001 para gastos de hasta 1.000 pesos.
Consultado sobre si existe alguna medida en agenda para compensar el impacto de esta decisión en la economía de la gente, el designado ministro de Hacienda respondió: "Acabamos de hacer una rebaja gigante en Ganancias, que ahora se llama impuesto a los ingresos. Vamos a remover el avispero y vamos ver unas cosas que juegan para un lado y otras para el otro. Es muchísimo más fuerte el impacto de Ganancias que el de las tarjetas de débito".
Además, advirtió que "tenemos una sobretasa del 40% por encima del salario de bolsillo, entre las contribuciones personales y patronales", y "sobre eso, después el empleado tiene Ganancias". "La proporción de la carga impositiva en relación al salario de bolsillo es muy grande y atenta en contra de la formalidad. El impuesto al cheque también atenta en contra de la formalidad. Tenemos muchos objetivos fiscales a la vez", indicó el economista.