El ministro de Ambiente, Juan Cabandié, confirmó que el decreto de 2019 que habilita la importación de basura será derogado por el gobierno.
Organizaciones del sector ya se habían expresado en contra del ingreso de residuos al país, considerándola una regresión en materia ambiental.
"Es indigno y un descalabro permitir la importación de basura, no hay ninguna razón para importar residuos, por eso en los próximos días se va a derogar el decreto", dijo Cabandié en referencia al decreto 591/2019.
El decreto en cuestión cambió las condiciones para permitir el ingreso de basura en el país al modificar la reglamentación vigente, dado que elimina ciertos requisitos que se les requería a los países emisores.
Así lo explica Leonel Mingo, coordinador de Greenpeace Argentina: "Esa medida flexibiliza los requisitos al quitar el certificado de inocuidad, algo que se considera una regresión en materia de derecho ambiental. Abre la puerta a que pueda entrar cualquier tipo de basura".
El último informe del Estado del Ambiente, actualizado en 2017, informa que en la Argentina se genera un promedio de 45.000 toneladas diarias de residuos sólidos urbanos (RSU). Esto equivale a una tonelada de basura cada dos segundos.
"Las potencias centrales como Estados Unidos y otros países europeos buscan introducir sus residuos en nuevos mercados, casi siempre países en vía de desarrollo con este tipo de eufemismos", alertaron desde Greenpeace.
Discrecional y riesgoso
El texto del decreto 591/2019 flexibilizó las restricciones para el ingreso de rezagos de papel y cartón, chatarra ferrosa, chatarra de aluminio, desechos de material plástico y vidrio roto, cascote y plásticos que pudieran ser insumo para un proceso productivo o como producto de uso directo.
Desde Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) cuestionaron el decreto porque "no toma en consideración aspectos sociales y ambientales claves, ni ser resultado de un debate amplio, y deja un riesgoso margen de discrecionalidad a las autoridades involucradas".
"Cuando se trata de la gestión de residuos, un tema de suma complejidad y en torno al cual cualquier decisión debe ser tomada de manera integral, con consideración no sólo de los aspectos netamente económicos sino, en igual medida, de los sociales y ambientales", publicaron en su web.
Cabandié adelantó que "se está preparando una propuesta superadora con respecto al tratamiento de la basura porque somos bastante medievales con el tratamiento de la basura. Tenemos 5.000 basurales a cielo abierto en todo el país".
"Expandir la economía es prioridad, pero no de cualquier forma. Tenemos que sentar bases para no seguir destruyendo nuestro ambiente que es el lugar donde vivimos", cerró el funcionario nacional.