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Curiosidades

Dejó su auto en el taller para que lo reparen y el chapista lo chocó

El hecho ocurrió en las primeras horas de la tarde de este jueves, en una de las esquinas del tradicional barrio Lesca de Concordia.

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De acuerdo a datos recabados en el lugar, eran cerca de las 16 horas cuando un automóvil Fíat UNO -de color oscuro- protagonizó un fuerte choque contra un árbol en el cruce de las calles Presbítero del Castillo y Montevideo.

La particularidad del hecho es que el conductor del vehículo no era su propietario, sino el responsable del taller de chapa y pintura donde el dueño del Fíat lo había dejado para que le hicieran una serie de reparaciones, que ahora serán mucho más de las previstas.

En el lugar tomó intervención personal policial que dialogó con el conductor involucrado, quien argumentó que perdió el control del rodado cuando presuntamente se le cruzó en su camino una motocicleta.

Fuente: Diario Río Uruguay

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Curiosidades

Un entrerriano cosechó un gigantesco zapallo de 127 kilos

La familia Hauser Grigolatto, de Los Charrúas, Concordia, volvió a sorprender con su cosecha de zapallos gigantes. Este año, uno alcanzó un peso de 127 kilos. «Lo hago por hobby, pero siempre trato de superar mis propios récords», contó.

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La familia Hauser Grigolatto, de Los Charrúas, Concordia, sigue cosechando zapallos gigantes, y este 2025 volvió a sorprender con una impresionante producción.

El joven Cristian Hauser, de 24 años, cosechó un zapallo que pesó nada menos que 127 kilos. Este nuevo récord es sólo uno de los varios que ha alcanzado la familia en los últimos años.

El zapallo cosechado en su campo "Paraíso de los Naranjales", ubicado a 2 kilómetros al este de Los Charrúas, es de una variedad especial originaria de Canadá. Según explicó Cristian, esta semilla fue traída de Buenos Aires, y la variedad está pensada para competencias debido al tamaño que puede alcanzar. «Lo hago más que nada por hobby, pero siempre trato de superarme», comentó el joven.

En 2024, la familia había recolectado zapallos de 33,8 y 59 kilos. Este año, la cosecha alcanzó su máximo con el ejemplar de 127 kilos

«Este año coseché tres zapallos: uno de 54 kilos, otro de 57 y el más grande de 127 kilos», detalló Hauser. Además, mencionó que también tiene zapallos de una variedad alargada, llamada calabaza serpiente, que llegaron a medir 1,28 metros de largo.

El joven agricultor destacó que el clima y la calidad del suelo son esenciales para el buen desarrollo de estos gigantes. «Este año, la tierra mestiza rica en nutrientes y las lluvias constantes ayudaron mucho, aunque cuando dejó de llover, tuve que poner riego, ya que un zapallo tan grande necesita mucha agua», explicó.

Sobre los cuidados, Hauser explicó que la cosecha de un zapallo gigante es mucho más lenta que la de uno común. «Desde que siembro hasta que cosecho, pasa más tiempo, entre cuatro y cinco meses, mientras que un zapallo común tarda solo tres meses», contó.

El zapallo gigante, además de su imponente tamaño, tiene características particulares. «De sabor es insulso, no tiene dulzor, es como desabrido. Pero el año pasado lo probamos hervido y en mermelada. En mermelada quedó muy rica», señaló.

Cristian, quien lleva toda su vida dedicado a esta actividad que es de familia, también destacó que el zapallo está siendo exhibido en la municipalidad de Los Charrúas. «Lo dejaremos allí una semana y luego lo traeré de vuelta», dijo.

Fuente: El Once

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