El exvicegobernador José Cáceres dijo haberse sorprendido al conocer la investigación que publicó el último jueves la revista "Análisis", en la que se revela la existencia de una mesa de dinero en el Senado, una irregularidad de la que habrían participado el actual ministro de Gobierno, Mauro Urribarri, y el actual funcionario de la Cámara Alta, Juan Pablo Aguilera, cuñado del exgobernador Sergio Urribarri.
Cáceres aseguró que "no conocía" de ese movimiento financiero, y que sólo escuchó de oídas el asunto "porque en su momento, cuando se dio una situación de gente que andaba llorando y quejándose de esa persona (Juan Sebastián Robledo, sindicado como operador de la mesa de dinero), ese mismo día o al día siguiente, lo llamé a Mauro para hablar, si sabía, cómo era el tema ese, y me dijo que no sabía absolutamente nada, cosa que le creí, obviamente".
Mauro Urribarri era responsable administrativo del Senado durante la gobernación de su padre y cuando Cáceres presidía la Cámara Alta.
"No tengo motivos para no creerle (a Urribarri). Aun ahora le sigo creyendo. Tengo confianza en sus palabras. Y por lo que leo en la revista, el tema es mucho más grande de lo que yo había pensado, que era un problema entre particulares", contó Cáceres durante un diálogo con el periodista Antonio Tardelli, en el programa En el dos mil también.
"Lo que leí (en "Análisis") es bastante fuerte. Yo supongo que los damnificados habrán hecho toda la denuncia. Y se tramitará", evaluó el exvicegobernador. "Ya el hecho de por sí es grave, y si encima hay una investigación que pone en duda de donde surgían los fondos para ese tipo de operaciones, si tenían que ver con este tipo de cuestiones como el narcotráfico, ahí estamos en la parrilla. Es un tema más que grave. La verdad que ojalá se pueda ir esclareciendo lo antes posible. Al final, quedo en el medio de una situación. Yo era presidente del cuerpo. Tenía responsabilidad institucional".
En la última edición de "Análisis" se cuenta que entre 2012 y fines de 2013 "funcionó una mesa de dinero en el Senado entrerriano, donde se movían unos 30 millones de pesos mensuales. En la oficina del entonces funcionario, Mauro Urribarri (actual ministro de Gobierno), se cambiaban miles de dólares por semana y de las operaciones participaban funcionarios, ministros, integrantes del Poder Judicial y conocidos empresarios". Y agrega que el "encargado de las operaciones -que dependía del actual ministro de Gobierno y de su tío Juan Pablo Aguilera en el Senado- se tuvo que fugar del país por las amenazas y atentados domiciliarios, después que se cayó el negocio. Siempre se ocultó la historia y nunca nadie investigó nada".
Cáceres, sin embargo, señala que nunca se enteró de nada de todo eso. O que nunca tuvo la real dimensión de lo que sucedía en el Senado.
"Yo me enteré cuando había gente llorando y me contaron mis colaboradores que querían hablar conmigo y yo les dije que primero hagan la denuncia. Y que después vemos de hablar. Pero antes de eso, inmediatamente, yo lo llamé a Mauro. No estaba en Paraná. Cuando volvió, fue automáticamente a verme, y le dije lo que me habían dicho. Me dijo que le habían dicho lo mismo y que no tenía ni idea. Esa oficina estaba cerca de la suya", reveló el exvicegobernador.
Aunque también habló de lo que hacía el ahora ministro de Gobierno. "Mauro tenía muchísimas actividades. Y muchas eran fuera de la Cámara de Senadores, porque el acompañó muchísimo a nuestro gobierno anterior. Y hacía reuniones políticas y sociales. Tenía un activismo muy presente en todo lo que tenía que ver con el gobierno de su padre", sostuvo.
–¿El Senado compraba dólares? –le preguntó Tardelli a Cáceres.
–No, el Senado no compraba dólares. No. No hay ninguna razón para que haga eso. Ni lo hacía. (Entre Ríos Ahora)