El damnificado maneja un Renault Kwid para la empresa Oeste y en las primeras horas del lunes debió lidiar con un mal trago con un cliente que le demandó un viaje de unos 40 minutos y un gasto de 1.236 pesos que no abonó.
Levantó su pasaje de forma ocasional en Misiones y Clavarino. Un muchacho joven, morocho, de pelo corto, bien vestido y bien hablado, le fue indicando los diferentes destinos a visitar en donde supuestamente pedía dinero para medicamentos para un familiar enfermo.
Con este cuento lo llevó a dos estaciones de servicio ubicadas en la Ruta 14, a un parador, al club Dock Sud de 3 de Caballería y Caseros; y la sala de tragamonedas ubicada en la avenida Parque. En total permaneció 40 minutos a bordo del remis y poco antes de las 3 finalizó el recorrido en Mosto y Clavarino. Una vez en el lugar descendió del rodado y ante la mirada absorta del chofer, comenzó a caminar en dirección al norte hasta perderlo de vista.
El damnificado realizó la denuncia por los 1.236 pesos que no le fueron abonados de su pasaje. Aportó características físicas de su pasajero y la Policía estaba tras la búsqueda de cámaras de seguridad de los distintos lugares a los que ingresó para identificarlo.
Desde la Policía se investiga la posibilidad que este mismo sujeto se encuentre relacionado con el asalto que sufrió un remisero pocas horas después. Alrededor de las 6.30, un remisero que se encontraba arriba de su auto estacionado en Rivadavia y República oriental, fue abordado por un delincuente coincidente en las características físicas, que le pidió que lo trasladara hasta Guido Spano y Misiones. Cuando el móvil llegó al destino indicado, el delincuente extrajo un arma blanca y le exigió que le entregara el dinero, escapando con una cifra cercana a los dos mil pesos.
Fuente: eldiaonline.com
