Casado había presentado en 2020 un primer proyecto que establecía una modificación al Código de Ética Municipal y que fijaba la obligatoriedad para que los funcionarios se realizaran de manera obligatoria una rinoscopía , el estudio que permite la exploración de las fosas nasales y conocer la afectación del tabique para constatar si el examinado consume o no drogas.
En esa primera propuesta, el edil apuntaba a establecer como "requisito de admisión, promoción y permanencia en los niveles políticos o jerárquicos de la función pública la obligatoriedad de la realización de exámenes médicos y bioquímicos para determinar la presencia de metabolitos de drogas ilegales".
En esta segunda iniciativa, Casado presentó sólo una modificación del artículo 50° Bis, del Código Electoral Municipal (10.073). El cambio propuesto establece que será "responsabilidad de los precandidatos, precandidatas, candidatos titulares y suplentes a cualquier cargo electivo municipal a acreditar el cumplimiento estricto de la presente normativa a través de la presentación... de un certificado de exámenes complementarios de diagnóstico con resultado negativo de la presencia de metabolitos de sustancias estupefacientes, expedido por instituciones de salud pública".
De prosperar la iniciativa, la cual tiene preferencia de tratamiento para dentro de dos semanas, aquellos que pretendan postularse en las elecciones municipales de 2023 –cuya fecha aún no fue anunciada por el intendente Llaryora– deberán presentar una certificación que asegure que no son consumidores de sustancias tóxicas.
"Este proyecto de ordenanza busco principalmente brindarle a la sociedad un modelo a seguir, una línea directriz de lo que debe ser y hacerse comenzando por los funcionarios del Estado municipal y de otros estamentos provinciales y nacionales, que somos los primeros que debemos dar el ejemplo de ética, moralidad, buena conducta y probidad. Más aún cuando en la mano estatal se proyectan ordenanzas como alcoholemia y drogadicción cero para aquellos que circulan", expresó Casado a través de los fundamentos del proyecto.
En diálogo con La Voz, el edil aseguró que hay voluntad en el Concejo Deliberante para que el tema sea tratado en comisión con la intervención de especialistas en la materia. Fuentes del oficialismo validaron la propuesta de Casado, aunque aclararon que el texto final del proyecto resultará del debate que se lleve adelante en comisión. "Estamos abiertos a realizar agregados en función de lo que surja", dijo a este medio una calificada voz del oficialismo, que agregó que la ordenanza podría incluir el examen para funcionarios, no sólo para candidatos.
La propuesta de Casado ya contó con el despacho por la mayoría e ingresó en la sesión especial del miércoles pasado para su tratamiento, por lo que con los votos del oficialismo el proyecto giró a comisión con preferencia de dos sesiones. Así y si no surgen inconvenientes, en menos de tres semanas el proyecto podría ingresar para su tratamiento y aprobación definitiva.
Si se da esa situación, sería la segunda modificación del Código Electoral Municipal en menos de un mes, ya que la primera se dio el miércoles pasado cuando Hacemos por Córdoba aprobó el proyecto de la edil Gabriela Paulí, alineada con el espacio político de Olga Riutot, para la eliminación de las candidaturas testimoniales.
"No deben tener nada que esconder los candidatos", expresó el concejal.
En ese marco, Casado apuntó directamente contra uno de los dirigentes de Juntos por el Cambio, al que vinculó con el consumo de drogas, aunque sin mostrar ningún elemento que lo respalde sus dichos.
En esta oportunidad, el concejal de Hacemos por Córdoba cuenta con el aval del intendente Llaryora, quien el sábado pasado dijo en Voz y Voto que avalaba una medida de este tipo. "Hay un proyecto que no discuten en el Concejo y que es importante: el tema de los controles para los candidatos en materia de drogas. Como yo lo hice en San Francisco", resaltó el candidato a gobernador del PJ.
"Hay que presentar un montón de condiciones para poder asumir un cargo, pero eso (lo de las drogas), que es clave, no se controla... Por supuesto, si la persona está enferma, que haya un tratamiento... Es para saber si un dirigente consume sustancias. En la lucha contra el narcotráfico no podemos tener a alguien que está en el consumo", dijo Llaryora que, ya en 2007 y como intendente electo de San Francisco, planteó la realización de rinoscopías.
En la misma línea que su antecesor en el gobierno municipal, el actual diputado nacional Ignacio García Aresca había presentado en 2017, como intendente de San Francisco, un programa de prevención del consumo de sustancias junto con un proyecto de ordenanza para que tanto el jefe local como los funcionarios municipales se sometieran a un estudio de rinoscopía antes de asumir en sus cargos.
Desde el interbloque de concejales de Juntos por el Cambio calificaron al proyecto de Casado como una "provocación de campaña", aunque aún no adelantaron posición sobre el tema. Desde el espacio político de Rodrigo de Loredo hicieron saber que no entrarán en el "juego sucio" de cara a las elecciones, aunque podrían acompañar la propuesta del oficialismo.
Fuente: La Voz de Córdoba