En la madrugada del día lunes, aproximadamente a la 1:00,  cuando por la ruta 26, a unos tres kilómetros de la entrada a Antelo, un automóvil, Peugeot 307 de color gris, que se encontraba al mando de un hombre de 44 años, acompañado de su pareja, colisiona a dos terneros, que cruzaban la cinta asfáltica.

Afortunadamente la pareja oriunda de Nogoyá no sufró lesiones de ningún tipo, aunque debieron lamentar la destrucción casi completa del auto.

Problemática de los animales sueltos

Con relación a estos hechos donde la causa o una de las causas es la presencia del animal suelto en la vía pública, tanto la Policía como la Justicia actúan.

En el caso de la Policía actúa de manera preventiva -cuando cumple con dicha función-, al multar a los propietarios de estos animales previo secuestrarlos y trasladarlos a un predio donde permanecen por un tiempo considerado y, en caso de no ser retirados por sus dueños, son faenados. Sin embargo, este accionar queda sólo en la sanción económica. Pero cuando un animal suelto causa un siniestro vial, si la víctima quiere actuar judicialmente, las actuaciones  de la Policía Judicial y las policiales en el resto de la provincia en el hecho son puestas a disposición de la Fiscalía.

Según las consecuencias del siniestro vial, el dueño del animal -si se lo logra identificar- deberá responder a una demanda civil por los daños causados o penalmente en caso de que haya personas lesionadas o fallecidas.