Claudia Bertoldi, de 45 años, falleció el miércoles 22 de septiembre en un centro de kinesiología de Concordia al que había asistido para la realización de un tratamiento estético que consiste en colocar gas carbónico debajo de la piel para eliminar marcas, estrías y grasa localizada. La información que tenía la familia de la víctima, es que ese gas, que debería aplicarse en una capa superficial de la piel, fue aplicado en su sistema circulatorio, lo que le provocó un colapso.

El informe que realizaron los forenses del Departamento Médico, dependiente del Superior Tribunal de Justicia, en el que se determinó que «la muerte se produjo por shock cardiogénico a partir de una embolia gaseosa».

Es por ello que la profesional interviniente será imputada en la causa judicial por el delito de «homicidio imprudente o culposo» por mala praxis, contemplado en el artículo 84 del Código Penal. Se trata de la kinesióloga Soledad Mitre, publica Diario Río Uruguay.

Si bien la imputación está decidida, aún queda concretar la fecha donde se le comunicará la novedad a la defensa, dado que proviene de Paraná y {pandemia mediante { debía realizarse el hisopado correspondiente.

El hermano de la víctima, Claudio Gastaldi, había contado que los profesionales que llevaron adelante esta práctica «estaban habilitados como kinesiólogos. Tenían un centro de Kinesiología, pero está prohibido a quienes no conocen del tema inyectar algo en el cuerpo de las personas».

Asimismo, en declaraciones al programa A Media Mañana negó que la víctima haya tenido alguna patología previa. «No tenía nada, era un torbellino por la cantidad de cosas que hacía», graficó.