Con una medida de récord de bajante de 1,30 metros registrada días atrás en la dársena del puerto local, el efecto de la copiosa lluvia de más de 100 milímetros caída el pasado lunes trajo algo de tranquilidad para Victoria y su suministro de agua potable, ya que en la mañana del martes el nivel de las aguas en el puerto local subió una altura de 2 metros, con el aporte pluvial de los arroyos El Ceibo, Manantiales y Doll.
La anterior bajante histórica sucedió en el año 2006, llegando a una altura en dársena de 2,25 metros, lo que -de forma comparativa- refleja la gravedad del registro actual.
Sedimentación del lecho del río
La falta de lluvias en el sur de Brasil y en las provincias de Misiones y Corrientes es la principal causa de la bajante y con un horizonte poco alentador, ya que el régimen habitual de lluvias cobra fuerza recién a partir del mes de septiembre.
No obstante, existe otro problema natural de proporciones: la sedimentación del lecho del río, sumado a la prolongada ausencia de mantenimiento en las tareas de dragado. A ello se suman las variantes de la sedimentación provocadas por el enlace vial Rosario Victoria y la construcción de terraplenes ilegales.
Palabra autorizada
En base a su larga trayectoria el encargado de Puerto y Fiscalización de la Delegación en Islas del municipio de Victoria, Gustavo Andino, indica al respecto que "Hay que tener en cuenta que hay una condición de sedimentación de lo que es la dársena, que se ve respecto de la escollera y sus escalinatas. Pero con el transcurso de los años se ha sedimentado tanto que nos acostumbramos a que sea la condición normal. Se sedimentó mucho y no hubo mantenimiento del río Victoria, que es lo más importante", refiere a Será Noticia.
En efecto, este hecho se aprecia a simple vista al observar las escalinatas que descienden desde el puerto hacia la zona de embarcaciones. Sus últimos peldaños están próximos al nivel del agua actual, con menos de un metro de diferencia.
"Acá la situación ideal es dragar el río Victoria, desde el Paraná Pavón a Puerto Victoria, y de Puerto Victoria a la Boca del Bobo y el arroyo Careaga", y agregó que el martes "estuvo aportando agua el río Paraná al Careaga, pero esas aguas se van por el Barrancoso y no llegan a Victoria, van por el medio de las islas. Por lo que habría que hacer una apertura del Careaga a la Laguna Grande.
"El que ha mantenido con agua la laguna hasta el momento ha sido el Paranacito de Victoria a la altura de Diamante".
La importancia de la Laguna Grande para Victoria
No obstante, Andino aclara que "El principal aportante es la Laguna Grande. Al sedimentarse las bocas de la laguna con caída a Victoria es necesario realizar con maquinaria su apertura, para que las aguas ingresen al río Victoria, ya que son las que tocan nuestras costas".
En los últimos días también llamó la atención la sequía de la extensa y mítica "Laguna del Pescado", que ante la falta de caudal del río Victoria quedó -por efecto dominó- sin agua, a punto tal de convertirse en una enorme extensión de tierra, que se asemeja a un enorme desierto.